.well-known

This is a Brave Rewards publisher verification file. Domain: condimentandocaminos.blogspot.com Token: fa1b017bd8fa3d31a8f6385615227899169acb51834e885ec8620d81cb01c06c

Compártelo

lunes, 3 de mayo de 2010

10 Minutos


El plato de la modernidad se cocina a fuego rápido e incluye dosis de exigencia, pelos de punta, carreras contra reloj. ¿Y el placer? ¿Y el tiempo de ocioso? Bien, gracias ante tanta angustia existencial, ¿Se convertirá la pausa y el disfrute en las formas de resistencia del siglo XXI?
Cinco años se demora un eucalipto para estirarse y tomar varios metros de altura, tres meses bastan para que otoño se convierta en invierno. Y unas pocas horas pide el pan para levar, hincharse, esponjar su miga y dar lo mejor de si, no hay nada que pueda cambiarlo, esos son los plazos, porque parece que las estaciones los ciclos biológicos, los procesos naturales…. Y el pan, tienen su lógica en el mundo, incluso en este mundo, que todavía redondo pero cada vez mas chico y apurado.
El tiempo del mundo moderno quiere que todo se resuelva, se cocine, se digiera, nazca y muera” en diez minutos”. La tiranía tecnológica impuso su vértigo y sus reglas. Estamos pegados a la pantalla de la computadora como chicle a la muela. Los celulares suenan con urgencia. Por que la comunicación siempre es directa y veloz, pero la espera nunca es dulce en el siglo XXI. El tiempo es oro.
Así son las cosas: no importa en que rincón del mapa estemos parados, cada segundo representa el valor monetario más alto. Resulta que hoy la meta es devorar caminos avanzar, no se sabe a donde ni como ¡pero ya! Y en ese ring actual de existencia instantánea, cocinada con McDietas, Relaciones Online, Sexo Express, Fast FAT, mas promesas de juventud quirúrgica se dirime la lucha sin cuartel entre producir menos y producir mejor, comer mucho y comer bien, durar mas y vivir bien. A pleno.
¿Quién o que gana la batalla? Depende. No todo esta domesticado, cada uno puede tomarse el trabajo de descubrir su derecho a la pausa y al placer, y defenderlo de la vorágine que pretende acelerar el ritmo hasta lo imposible.
La naturaleza, la química y la magia de la cocina dan argumentos a la espera: recordar que si sacamos una torta antes de tiempo del horno naturalmente es ley que la tendríamos que comer cruda. Si no dejamos el cordero en el asador a fuego lento por horas y horas es seguro que la carne no quede tierna, ni dorado e irresistible.
Claro esta como el agua que nadie necesita discursos ecolohippies, nostalgiosos de un pasado preindustrial y arcaico. Mas vale buscar el eslabón perdido del disfrute, en esta cadena productiva que no deja resquicio para el paréntesis y la subjetividad, por que el reto que nos plantea el milenio no es la manera de ganar minutos sino la de perder el estrés.mas que una formula para correr mas rápido estaría bueno hallar la clave para saber en que instante detenernos.
Darle tiempo al tiempo hoy se perfila como la forma mas acabada de resistencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario