¿Cuál es el futuro y el camino a seguir de la gastronomía Colombiana?
Sin duda alguna este es el interrogante que dio origen a la temática y la creación del congreso gastronómico nacional de Popayán, el Congreso celebra de esta forma 10 años de promover, desde lo académico, lo más selecto de la cocina nacional e internacional. Siempre dedicados a rescatar, y dejar en alto la gastronomía tradicional colombiana.
Pero ¿Por qué Popayán?
Por su ubicación geográfica, en Popayán confluyen diversas corrientes gastronómicas, principalmente andina, pero con mezclas marcadas de costa pacífica, del campo, de los inmigrantes europeos y comunidades religiosas que se asentaron en la ciudad, la gastronomía payanes se considera una de las gastronomías que mas conserva sus tradiciones culturales y ancestrales. Reflejando así el gran mestizaje cultural que dio origen a la gastronomía tradicional colombiana, y es algo que queda muy claro y por lo cual seguimos trabajando, ya que no existe una única cocina colombiana, si no un sinfín de sabores, variedades y técnicas que nos hacen muy diversos, generando un atractivo gastronómico en espera de la identidad gastronómica del país, que permita su auge a nivel internacional hasta el punto de ser otra de las grandes gastronomías de categoría mundial proveniente de Latinoamérica, como son la gastronomía peruana y mexicana.
¿Que hemos logrado?
Gracias al congreso gastronómico de Popayán, se estableció como ideología en los personajes más representativos de la cultura gastronómica nacional, el promover y rescatar la gastronomía colombiana, abriendo un espacio cada vez más propicio para el estudio y la investigación, generando año tras año un debate entre sus protagonistas.Lo mejor en mi opinión es que las personas que venían del extranjero se percataron que la cocina colombiana tiene potencial.
Pero no es solo la gastronomía colombiana la que se ve beneficiada por el congreso gastronómico nacional de Popayán, también toda la cultura y la academia encontraron un lugar en el cual confrontar los diversos conocimientos adquiridos sin salir del país, y se debe por supuesto a que año tras año el congreso tiene un invitado especial (un país) y una región anfitriona, que se encarga en pocos días de dar a conocer su cultura, sus tradiciones, y enseñarnos por medio de su ejemplo tangible las diferentes formas con las cuales podemos ayudar al crecimiento cultural de nuestro país.
Este año por su parte el turno fue para la república de Corea del Sur como invitado, y la región pacífica como anfitriona, como era de esperarse la capital caucana acogió a cientos de aficionados con lo mejor de la cocina.
El embajador de Corea del Sur en Colombia, Jong Youn Choo, explicó cómo están las relaciones entre los dos países, de los lazos de sangre que nos unen y del respeto y amor que tienen hacia el pueblo colombiano; en ese mismo escenario, la delegación de corea nos enseño todo sobre su cultura, arte, música, baile, economía, y sobre todo gastronomía.
Igualmente se presentaron otros grandes exponentes de la gastronomía mundial, entre ellos Juan Barbasil, el más connotado comunicador de la gastronomía española, este por su parte nos describió el proceso evolutivo de la gastronomía española y desmintió o aclaro lo que realmente es la gastronomía molecular, dejando claro que es una ciencia, y no una tendencia.
Y el “Chef Executive“, peruano, Rafael Rodríguez quien ha sido el responsable de la promoción de la cocina peruana en Europa, en donde se registra un auge sin antecedentes de la gastronomía del país suramericano. Rodríguez, explico sobre la forma en que el Perú ha logrado instalarse como el país de la oferta culinaria más importante de América Latina.
Para terminar este gran banquete académico, el congreso gastronómico nacional de Popayán estableció una Mesa Redonda “10 años de Gastronomía en Colombia” con la participación de figuras como Lácides Moreno, Ignacio Cajiao, Germán Patiño, Carlos Ordóñez, Eduardo Macía, Soffy Arboleda de Vega, Juan Carlos Franco y Julián Estrada, todos ellos galardonados en años anteriores con la Placa de Honor del Congreso para sacar las conclusiones más importantes e influyentes de estos 10 años sobre el presente y futuro de la gastronomía Colombiana. Dejando claro la importancia del congreso nacional de gastronomía, sus logros académicos, sociales y políticos para nuestro país
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